Hace unos meses se me escapó una de esas fotos que te arrepientes de no haber hecho. Había una chica esperando en el semáforo con una vespa rosa y un casco rosa.
Vestía con una falda sugerente y sus piernas acababan en unos largos tacones. Pisaba el asfalto para mantener el equilibrio.
Dudé un par de segundos en sacar la cámara de la funda, y mientras dudaba el semáforo se puso en verde y el momento pasó.
Hoy, dándome una vuelta en Gros, me encontré con una Vespa rosa. ¿Sería la que llevaba la chica aquel día?
Por lo menos hoy no se me escapa la Vespa.