Segundo día en Barcelona de relax mini-vacacional.
Una vecina de mi hermano tiene un gato que a veces se pasea por la barandilla del edificio hasta llegar al balcón, para hacer una visita.
Una de esas visitas cojo la cámara y le retrato. Por desgracia mi 24-70 mm no me permite acercarme mucho, asi que tengo que hacer mucho recorte para ver la cara de la fiera de cerca.
Mientras saco fotos, tengo que evitar que la gata de mi hermano, a la que no le gustan las visitas, vea a su vecino.